En la madrugada del 6 de junio de 1840 (sábado) fallece en L´Hermitage (Francia) Marcelino Champagnat. Tenía 51 años de edad y 23 desde la fundación de los Hermanos Maristas.

Su vida no fue fácil, dejó la educación a edad muy temprana, a los 8 o 9 años, según lo que comentaban los hermanos. Esto le permitió conocer la vida de campo y la importancia del trabajo. Sintió el llamado de Dios a edad muy temprana, de ahí que su camino tomó distintos desafíos, consiguiendo su sacerdocio el 22 de junio de 1816 de manos de monseñor Dubourg, obispo de Nueva Orleans. Al día siguiente, Marcelino y doce compañeros suyos subieron al santuario de Nuestra Señora de Fourvière, donde se consagraron a María y prometieron trabajar para fundar la Sociedad de María.

Entre los años 1824 y 1825 comenzó la construcción de una nueva casa para los hermanos, el Hermitage, que será el centro de su actividad educativa. La comunidad estaba formada por 20 hermanos y 10 postulantes. Así nacen los hermanos de María, con un fuerte compromiso hacia la educación de los niños.

Al momento de su muerte, 473 hermanos habían ingresado, 69 se habían retirado y fallecido 48. Se habían abierto 54 obras y cerrado 5. Un total de 9 hermanos estaban repartidos en misiones en diversas islas de Oceanía.